Dicen que el líder nace, no se hace. Lo cierto es que en tiempos complicados se recurre a los líderes en busca de esperanza e inspiración que permita a las empresas seguir hacia adelante, mirando al futuro con optimismo. Aquí van una serie de consejos para todos aquellos que desempeñen un papel como líderes o que tengan como meta serlo algún día. El ser nombrado líder no necesariamente nos convierte en ello. Pero el liderazgo de alto rendimiento y liderar al límite son talentos que todos podemos aprender.
Desarrolle su habilidad de liderazgo. Las empresas con una cultura que desarrolla el liderazgo destacan, ya que se convierten en imanes de talentos al ofrecer continuamente oportunidades para que las personas aprendan, crezcan y construyan habilidades de liderazgo. Al igual que otras habilidades, el liderazgo se desarrolla a lo largo de años de aprendizaje, formación y práctica focalizados.
Lidere desde el ojo de la mente. Si aprendemos a dominar el ojo de la mente podremos elegir cómo pensamos, sentimos y actuamos en un determinado momento. El cerebro puede ser entrenado para buscar oportunidades y superar los obstáculos, del mismo modo que hacen los atletas, los músicos y los actores. Los líderes que aprenden a programar sus cuerpos y sus emociones para obedecer a la mente siempre tendrán un mejor rendimiento que los otros, y la habilidad del liderazgo personal es el resultado de la conciencia y la regulación de nuestros estados mentales y emociones.
Construya el éxito a través de sus relaciones básicas seguras. Una relación segura es alguien que brinda una sensación de protección, es una fuente de inspiración positiva y ofrece bienestar en tiempos de estrés, frustración o fracaso. Algunas personas muy talentosas fracasan porque carecen de bases seguras o elijen las incorrectas. El contar con el apoyo de una base segura hace que alcanzar metas aparentemente inalcanzables sea posible, simplemente porque creen en usted más de lo que usted cree en usted mismo.
Lidere a través de una comunicación efectiva. Una característica distintiva de los líderes de alto rendimiento es la capacidad de influenciar a otros a través de todos los niveles y tipos de comunicación, desde simple interacciones a conversaciones difíciles y conflictos más complejos, con el fin de lograr una mayor alineación grupal y de organización.
Liderazgo a través del manejo de conflictos. El cambiar conflictos negativos por compromisos positivos es crucial para el buen rendimiento de las organizaciones. Los líderes de alto rendimiento tienen la capacidad de hacer frente a disputas, desacuerdos y puntos de vista diferentes. Las organizaciones que alientan a las personas a plantear temas difíciles han comprobado que hacerlo lleva a la innovación, nuevas metas y los cambios necesarios para alcanzarlas.
Liderazgo en un mundo fragmentado. Entre los numerosos desafíos que los líderes deben enfrentar en el siglo XXI, la fragmentación en grupos de ejecutivos y sus organizaciones se presenta a menudo como una importante barrera para la ejecución y la implementación. Los líderes pueden aprender a desarrollar y a construir grupos y equipos integrados en las organizaciones globales, creando una organización con «suficiente» sentido de dirección y propósito compartido que haga posible el cambio.
Liderazgo a través de una estrategia. Los líderes se enfrentan a numerosas metas conflictivas, y necesitan explicar lo que significa tener una estrategia en el actual ambiente de negocios. Esto incluye comprender tanto el papel estratégico del equipo de liderazgo dentro de la organización como los desafíos del proceso estratégico en general de los líderes individuales. Visualizar futuros alternativos permite a los líderes clarificar direcciones y opciones potenciales como base para hacer posible una elección de liderazgo.
El liderazgo al límite es una travesía. Los líderes de alto rendimiento saben que aprender a liderar al límite es un proceso de descubrimiento de por vida. Al jugar para ganar, en lugar de jugar para no perder, los líderes hacen que el trabajo sea un lugar más apasionante, agradable y atractivo para ellos mismos y para todos aquellos a su alrededor. Con esta base, el manejo del negocio y la estrategia de implementación serán mucho más exitosos.